Se entregó el ex jefe de la Policía de Escobar acusado de violencia de género entre otros cargos

Actualidad 02 de septiembre de 2021 Por EscobarNews
El comisario inspector Rubén Marcell llevaba cuatro días prófugo luego de que su mujer lo denunciara por golpes y amenazas de muerte. Ahora también enfrenta imputaciones por encubrimiento agravado y tenencia ilegal de arma.

Este miércoles el ex jefe policial se puso a disposición de la justicia luego de que su mujer lo denunciara por haberla atacado a golpes en la cabeza y amenazarla de muerte. Pero eso no es todo: el depuesto ex jefe de la Policía Distrital de Escobar también enfrenta imputaciones por encubrimiento agravado y tenencia ilegal de un arma de guerra.

Tas un allanamiento en la vivienda la cual habitaba su pareja, en la localidad de Rincón de Milberg, se halló un arma de guerra sin registrar y una moto robada con patente falsa, lo cual complicó aún más la situación del exfuncionaro.

Cuando los efectivos llegaron al lugar luego de que una vecina denunciara haber escuchado gritos y forcejeos, fueron atendidos por la mujer del comisario, quien les dijo que se había tratado solo de una discusión y no quiso hacer la denuncia.

Pero ese mismo día, por suerte, decidió con mucho valor presentar una denuncia contra Marcell y durante una videoconferencia que realizó con el fiscal Callegari se mostró “muy afectada y desesperada”, según trascendió.

“Me amenazó con el arma de fuego reglamentaria y en casa tiene dos armas”

“Te voy a matar. Vos no me vas a denunciar ni a arruinar la carrera”, fue una de las amenazas que le hizo mientras la apuntaba con un arma, según contó la afectada

Tras la exposición de la víctima y la certificación de las lesiones sufridas, el fiscal Callegari acudió a la vivienda, de donde Marcell se había ido el mismo sábado tras el hecho, y se entrevistó con la víctima, quien le entregó un revólver calibre 38 y una escopeta.

En las próximas horas el acusado será indagado por los delitos de “lesiones leves doblemente agravadas por el vínculo y violencia de género, amenazas coactivas agravadas, tenencia ilegal de arma de guerra y encubrimiento triplemente agravado por ser un hecho grave, cometido por un funcionario público y con ánimo de lucro”, en el caso de la moto hallada en su poder.

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