La historia de este programa habitacional se remonta al 2009, cuando fue anunciado por quien era ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, en un acto que compartió con el entonces intendente Sandro Guzmán. Pasaron doce años y todavía sigue inconcluso.

La obra se mantuvo prácticamente paralizada durante toda la gestión de la gobernadora María Eugenia Vidal (tuvo una ligera reactivación en 2018) y fue retomada en el segundo semestre del año pasado. Se estimaba que a fines de 2020 habría al menos unas 50 viviendas listas para estrenar, pero eso tampoco sucedió.

“A pesar de las dificultades generadas por la pandemia, pudimos poner en marcha nuevamente estas obras. Actualmente se están realizando tareas para completar la conectividad de agua, electricidad, cloacas y la instalación de una planta de tratamiento”, expresó el administrador general del instituto, ingeniero Miguel Oroz.

Las casas cuentan con una construcción tradicional y tendrán dos dormitorios, baño y cocina-comedor. También habrá un módulo de viviendas adaptadas para personas con dificultades motrices.

El predio donde se están llevando a cabo este programa habitacional se encuentra en los fondos del barrio Amancay. A través de una ordenanza sancionada en diciembre de 2011 se le impuso el nombre Memoria, Verdad y Justicia.